Publicado el 10 de octubre de 2021

“El curso me parece muy interesante porque aborda una disciplina que es poco difundida pero muy importante para los que nos desempeñamos como prevencionistas de riesgos, especialmente en condiciones post-pandemia”: César Flores (El Salvador), alumno becario del “II Curso de Ergonomía”, UdeC-AGCID

 

El profesional oriundo de El Salvador, participa junto a otros 46 alumnos de Latinoamérica en el II Curso Internacional de Ergonomía: Bienestar humano en la nueva normalidad y su impacto en la productividad, promovido por la Dirección de Relaciones Internacionales UdeC en colaboración con la Agencia de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AGCID).

“Lo que estamos abordando en el curso es y será importante para incorporarse en los programas de gestión de la salud y seguridad en el corto plazo, lo que considero el propósito principal de mi participación”, comentó César, quien actualmente se desempeña como Supervisor de Seguridad Ocupacional.

El profesional contó que su interés por seguir este curso surgió debido a la relevancia que ha logrado la ergonomía, del escaso acercamiento con la temática y particularmente con especialistas dedicados al área de ergonomía; además de su enfoque, el cual tiene presente las condiciones particulares que surgieron como resultado de la pandemia por Covid-19, lo que sin duda ha replanteado la vida de las personas en muchos sentidos.

“Mis expectativas del curso estaban relativamente acortadas por mi conocimiento del tema al momento de mi postulación, pensé que se basaría netamente en aspectos de antropometría y diseño de puestos de trabajo en casa, esto por la modalidad de teletrabajo a causa de la pandemia, pero ya una vez en el curso se ha abierto un abanico de temas lo cual está siendo cada vez más interesante, muy especialmente por lo apasionados que son los profesores en este tema y lo profundo que se percibe se han empeñado en estudiar al respecto, creo que, resumiendo, en pocas clases han cambiado por completo el concepto que tenía de la ergonomía a algo mucho más vasto”, aseguró.

En cuanto al desarrollo de las clases, Gary reconoció que es realmente ameno, que no se percibe la brecha entre el profesor y el estudiante, ya que los profesores son muy abiertos a la escucha y respetuosos de las opiniones tan variadas que surgen de un grupo de múltiples naciones representadas, “los comentarios de las experiencias de profesores tan experimentados como el Dr. Elías Apud y, en particular, la narración de experiencias en el campo en realidad enriquecen, ya que, por lo general, representan las dificultades con las que generalmente nos encontramos al desempeñarnos en nuestras funciones, además de convertirse en herramientas, tanto técnicas como humanas, que vamos atesorando”, dijo.

Uno de los temas que más le atrajo fue el «tecno-estrés», la fisiología y biomecánica, “estos temas interrelacionan la respuesta del cuerpo a los estímulos externos del entorno del trabajo, muchas veces con resultados indeseables, por lo tanto, es importante que se consideren las prácticas menos perjudiciales para el trabajador, además de dotarles del conocimiento que les permita prever los efectos del trabajo en su organismo, creo que ese aspecto está inmerso en todas las temáticas, el factor preventivo y el sustento científico que le antecede”, contó.

Además, destacó el profesionalismo con el que los profesores imparten sus clases, “me han parecido muy simpáticos, tanto que pareciera que están tan felices y satisfechos de poder compartir sus conocimientos, como conociendo anticipadamente el bien que están generando a los beneficiarios finales de este curso como lo son los empleados de las instituciones representadas por cada estudiante”.

La ergonomía y el bienestar cobran mayor importancia especialmente considerando que al ser una disciplina poco difundida y, considerando que su ausencia o poca aplicación en la práctica no revele consecuencias de forma inmediata o a corto plazo, suele subvalorarse y, por lo tanto, no se dedican tantos recursos para su estudio y desarrollo, al menos en la mayoría de los países de Latinoamérica, por lo que contar con este tipo de asesoría y especialmente en la lengua propia es muy importante para los que desempeñamos como prevencioncitas de riesgos y especialmente en condiciones post-pandemia”, recalcó.

Son estos conocimientos los que el profesional busca integrar y poner en práctica en sus labores de prevención de riesgos, como en la incorporación de criterios en la planificación del desarrollo del trabajo, tanto de campo como para el personal que ejerce en trabajos administrativos.