Cooperación internacional: el compromiso de la AGCID y la UdeC para el desarrollo de los países en Latinoamérica

“Los países se han dado cuenta, que por sí solos, no pueden lograr los objetivos propios del desarrollo de las sociedades, y que se pueden obtener mejores resultados a partir del enlazamiento entre distintos actores del ámbito internacional”, aseguró Margit Gere, Encargada (s) de la Unidad de Formación de Capital Humano de la Agencia Chilena de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AGCID).
Es por esto que la AGCID, institución encargada de gestionar y articular la cooperación internacional para el desarrollo, que Chile recibe y otorga a otros países; ha trabajado en el fortalecimiento de su programa de cooperación a terceros, particularmente a través de la llamada Cooperación Sur-Sur, herramienta de interacción que se basa fundamentalmente en la transferencia técnica de experiencias y conocimientos .
En este contexto, la Agencia en conjunto con la Universidad de Concepción, promovió y desarrolló, por segundo año consecutivo, los cursos internacionales de Telemedicina y Ergonomía; los cuales fueron seguidos por 96 alumnos provenientes de 15 países latinoamericanos, entre ellos, Brasil, Honduras, Perú y Colombia.
“La internacionalización es un fenómeno que se ha propiciado fuertemente en el último siglo lo que se ha entrelazado con la actual crisis sanitaria, que trasciende las fronteras y demuestra que la acción unilateral de un país no es suficiente. Y si en un principio, la emergencia debía atenderse desde el propio país, también debe ser en conjunto con otros países, en lo que podría denominarse “urgente”. En este sentido, la cooperación internacional se ha ratificado como un instrumento de solidaridad entre los Estados y sus comunidades”, señala Margit Gere. “Lo podemos reflejar tanto en la urgencia de los procesos de vacunación, el consenso de acciones conjuntas, pero también en la transferencia de buenas políticas, que hayan sido eficaces y eficientes”, agregó.
No obstante, la profesional reconoció que se está trabajando en la situación post pandemia, en la cual se verán reflejadas las consecuencias de esta crisis. “Es aquí donde la internacionalización también jugará un rol preponderante, ya que deberemos actuar conjuntamente en soluciones positivas y perdurables en el tiempo. Y aquí, cada país ha obtenido sus propias enseñanzas y tiene un deber ético, transferir estas enseñanzas”, dijo.
La pandemia, según Margit, no solo nos ha dejado un legado muy lamentable en temas sanitarios, que nos marcará históricamente, sino que además ha afectado a distintas áreas del desarrollo. “Algunas formas y mecanismos, han debido variar y adaptarse rápidamente a esta nueva realidad. Los cursos internacionales, tanto de Telemedicina como de Ergonomía, buscan potenciar un nuevo y emergente mecanismo de atención en el área de la salud, que, si bien en un momento se hizo necesaria, es además una oportunidad que ha surgido y que puede traer beneficios importantes a la sociedad si se implementa de la forma correcta”, comentó.
Es así como en estos más de 30 años de la AGCID, Chile ha exportado muchas políticas públicas así como también iniciativas privadas de desarrollo, a países socios, particularmente de la región americana, con el fin de que podamos avanzar juntos como región en el desarrollo, sin dejar a nadie atrás. “El compromiso de esta Agencia, es el fortalecimiento constante de este programa, orientado fuertemente en la ejecución de proyectos de cooperación, así como también en la formación de capital humano, principales programas que Chile ha logrado destacar y ofrecer”, finalizó.