Entrevista a Elías Apud, docente UdeC pionero en Ergonomía
- A punto de cumplir 50 años en el Departamento de Ergonomía, el «Ergónomo del Mundo» reflexiona sobre los hitos de su carrera como docente e investigador UdeC, sus logros internacionales e inminente retiro.
Oriundo de Santiago, el destacado profesor Elías Apud estudió en la Universidad de Chile en los años 70 y posteriormente viajó a Suecia a realizar una especialidad en Ergonomía en la Universidad Arbetsmedicinska Institutet, para luego continuar sus estudios de MSc y PhD en la Universidad de Loughborough, Inglaterra.
A su regreso, el docente recibió una invitación que cambiaría el rumbo de su carrera. «Cuando volví a Chile se estaba conversando sobre crear un Laboratorio de Biología del Esfuerzo en la Universidad de Concepción que estaría a cargo de Hugo Donoso, quien finalmente no pudo trasladarse a Concepción y yo vine en su reemplazo. Le dije voy a ir a ayudar en esto por 6 meses y me quedé por 49 años en la Universidad».
Este hito sitúa al docente Apud como uno de los fundadores de la disciplina en Chile, junto a Ennio Vivaldi y Hugo Donoso, con quienes inició el Laboratorio de Biología del Esfuerzo. Este centro de investigación en Ergonomía y Fisiología del Trabajo, pionero en Chile, se convertiría luego en Unidad, para después transformarse en el Departamento de Ergonomía de la Facultad de Ciencias Biológicas.
«Cada década de estos casi 50 años ha tenido su etapa de desarrollo. En los primero 10 años, en la década del 70, dimos a conocer qué significaba el concepto, porque no se conocía bien y había que aclarar hacia dónde íbamos. Hicimos los primeros cursos de ergonomía, colaboramos con otras universidades chilenas y nos abrimos a la investigación en campos que eran bien críticos en la época, como la minería del carbón, las industrias forestal y textil. Así fuimos sentando las bases para el desarrollo que hoy tenemos. Fuimos los primeros y hoy somos uno de los pocos lugares de Latinoamérica en que se ha practicado la Ergonomía ininterrumpidamente por 49 años».
Contribuyendo al desarrollo de la Ergonomía internacional
El Laboratorio de Biología del Esfuerzo tuvo su primera iniciativa de colaboración internacional con el trabajo que el profesor Apud impulsó junto a dos investigadores suecos. «En la década del 70 escribimos un programa para la iniciación de las actividades de la Ergonomía para Chile y países en desarrollo, que fue tomado por la OIT y que fue difundido a nivel mundial con gran aceptación. Y en torno a eso, en los 80 se creó un grupo para la promoción de la Ergonomía de los países en desarrollo. En ese contexto fui director de 4 cursos de especialización en Ergonomía en la Universidad de Wageningen, en los Países Bajos, para profesionales de Asia, África y América Latina.
A este documento, le sucedieron otras publicaciones como el libro «Ergonomía Forestal: el caso chileno», escrito junto a Sergio Valdés, que fue publicado en inglés y que tuvo amplia repercusión en el exterior.
«Tuvimos mucho contacto a nivel internacional en esa época y de ahí parte todo el reconocimiento que ha tenido el departamento. Por ejemplo, en el ámbito forestal, hemos tenido grandes reconocimientos de la International Union of Forestry Research Organizations (IUFRO) por la contribución que hemos hecho al desarrollo de la ergonomía forestal a nivel mundial».
Bajo la dirección del Dr. Elías Apud, el centro universitario ha sido requerido para colaborar en forma externa para la FAO, la Agencia Sueca para el Desarrollo Internacional (ASDI), la y el grupo para la Promoción de la Ergonomía Forestal y Agrícola (PET) con sede en los Países Bajos.
La investigación aplicada es un campo apasionante para el Dr. Apud pues, a pesar de las dificultades y vericuetos que representa el traslado del material, nunca han faltado experiencias inolvidables, como la que le tocó vivir en África. Al respecto, relata una anécdota que le sucedió en África hace unas décadas.
«Cuando era más joven fui a África y me querían tomar preso porque llevaba un instrumento hecho de fierros. En un aeropuerto me detuvieron porque no sabían qué era y pensaban que era una especie de metralleta. La docencia es más fácil». Comenta el profesor mientras sonríe al otro lado de la videollamada.
«Somos un referente latinoamericano»
En los años 70 y 80, el profesor impulsó la colaboración docente con universidades allende los Andes, iniciando un camino de vinculación que permanece y que ha crecido hasta hoy, con instituciones latinoamericanas, tales como la Universidad de Buenos Aires, la Universidad Tecnológica Nacional de Argentina, la Pontificia Universidad Javeriana de Bogotá y la Universidad de Guadalajara de México.
«Nuestro desarrollo docente ha sido bastante pionero. Tenemos un trabajo importante con las universidades latinoamericanas, desde la última década, que ha sido posible por la proyección que ha tenido nuestra docencia semipresencial. Tenemos una vasta experiencia en docencia virtual. A nosotros el Covid no nos sorprendió sin estar preparados, porque entendimos que para proyectar nuestro trabajo debíamos ofrecer una alternativa de muy buena docencia a distancia, que no sólo fuera un repositorio, sino que debía tener una metodología propia. Por eso, el diplomado que iniciamos el año 2000 tuvo dos ediciones presenciales para desarrollar una buena metodología presencial que pudiéramos transferir a la educación a distancia, para entregar algo de la misma calidad».
En el mismo ámbito, el profesor Apud se refiere con orgullo a los logros internacionales de su departamento y el reconocimiento que han tenido mediante el magister que se imparte hace 10 años y la Revista Científica «EID Ergonomía Investigación y Desarrollo», que tiene a la fecha 6 números editados.
«El gran éxito nuestro ha sido impartir el primer magister semipresencial en la Universidad, que tuvo también dos primeras ediciones presenciales. En esto quisiera destacar el tremendo profesionalismo del CFRD con quienes en conjunto desarrollamos una plataforma de primer nivel para el magister, lo que nos ha permitido graduar a cerca de 200 alumnos, siendo la mitad de ellos extranjeros de América Latina, incluyendo centroamericanos y mexicanos. Somos considerados como un referente latinoamericano y eso lo dicen muchas organizaciones. Además, creamos una revista que la Unión Latinoamericana de Ergonomía asumió como el documento oficial de difusión científica de la organización y eso le da una tremenda proyección al trabajo que realizamos».
Reconocimientos y últimos años de su carrera
A sus 78 años, el docente bromea al responder sobre los premios que ha recibido por su contribución a la investigación de la Ergonomía y la Fisiología del Trabajo y muestra humildad al hablar de ellos. «Me estoy poniendo viejo y me están llenando de premios. Pero con tantos años de trabajo he tenido bastantes reconocimientos. El más importante ha sido el que me entregó el 2009 la IEA (International Ergonomics Association), por la promoción de la Ergonomía en los países en desarrollo. Y en el 2019 tuve un reconocimiento de la Sociedad Mexicana de Ergonomía donde me declararon Ergónomo del Mundo, que es muy divertido porque me lo imprimieron. Pero me cuesta decirlo porque es muy ostentoso».
Sin duda, el premio otorgado por la organización mexicana refleja la trayectoria de un profesional pionero en su disciplina, que ha llevado el nombre de la Universidad de Concepción por el mundo, aportando lo que él denomina el «Modelo UdeC», que define como una mirada integral de la Ergonomía, equilibrada y muy independiente que ha tenido bastante repercusión en América Latina.
Sobre el futuro, el Dr. Elías Apud, el docente, apronta a celebrar el cincuentenario del Departamento de Ergonomía el año 2022, fecha en la que está visualizando además un posible retiro de la docencia para abocarse a la vida familiar. «Quiero publicar algunas cosas más, pero estoy pensando en la jubilación. Mi idea es no eternizarme en el tiempo. Son muchos años y estaría bueno descansar».
Después de una entrevista llena de energía y de pasión por su trabajo y la Universidad nos despedimos con el consuelo de que, el Ergónomo del Mundo y de la UdeC, lo continuará siendo por mucho tiempo.
«Voy a contribuir en todo lo que me pidan. Pero no pretendo llegar a nada más arriba, al contrario, voy cuesta abajo en la rodada, ya retirándonos”, señala sonriendo.