“El intercambio, tanto a nivel personal como académico, fue muy enriquecedor”, manifestó Juan Sandoval Aguilera, estudiante de Educación General Básica de la UdeC, quien realizó su práctica profesional como profesor de escuela elemental en University of Saint Thomas, Minnetonka (EEUU) durante los últimos cinco meses.

Juan formó parte de un grupo de seis estudiantes de la Facultad de Educación UdeC en realizar el intercambio. Particularmente el estudiante forma parte de la Escuela de Educación del Campus Los Ángeles de la UdeC, el cual fue seleccionado para vivir esta experiencia y fue el único alumno perteneciente al campus de Los Ángeles. Esto, en el marco de un convenio entre la UdeC y la universidad estadounidense, el que está siendo apoyado intensamente por la facultad, tanto para facilitar la movilidad como para asegurar la repatriación de los estudiantes en condiciones especiales de cierre de fronteras por el C-19.

El joven oriundo de la comuna de Los Ángeles, región del Biobío, tuvo la posibilidad de aprender las distintas formas que los docentes utilizan para relacionarse con sus estudiantes, las herramientas y estrategias de las que disponen, debido a sus altos estándares de desarrollo profesional.

«Yo decidí elegir este intercambio porque me entregaba la posibilidad de conocer el funcionamiento de los programas de inmersión en español desarrollados en las escuelas públicas de Minnetonka», relató.

“Además, este programa de intercambio me dio la posibilidad de vivir con una familia estadounidense, con la cual compartí experiencias y conocí mucho más acerca de su cultura y estilo de vida”, agregó.

Un viaje enriquecedor

La aventura comenzó aquel día que recibió un correo por parte de la  Subdirección del Campus Los Ángeles UdeC, donde estudiaba, en el que se le anunciaba que se había adjudicado la beca Minnetonka para realizar su pasantía, “una vez listo, el campus me facilitó los todos los medios para poder financiar todos mis gastos de viaje a Estados Unidos”, contó.

Lo difícil fue dejar a su familia, polola y amigos, pero las ganas de crecer como persona y profesional lo alentaron y llenaron de entusiasmo.

Así fue como viajó hasta la ciudad de Minnetonka y vivió en un pequeño pueblo llamado Excelsior. Tenía una hermosa vista al lago y muchos lugares bellos para visitar. “Las personas son maravillosas y amables, no existe delincuencia en aquel lugar. Nunca me enfrenté a una persona por algún gesto o comentario inapropiado, al contrario, la gente en la calle y en los comercios es muy agradable y cálida”, aseguró.

Por lo mismo, el joven contó que no se generaron problemas después de la muerte de G Floyd, porque Excelsior es una zona con un estándar de vida muy alto y con bajos índices de desigualdad. “Es un sector demasiado exclusivo, por lo que no existieron manifestaciones de ningún tipo”, afirmó.

Aun así, la familia norteamericana que lo acogió era consciente de lo sucedido, “estaban muy avergonzados de que el racismo siga existiendo en su país, avergonzados de la cara que estábamos viendo de Estados Unidos”, contó.

Su experiencia

Juan realizó su pasantía como docente y dictó clases a estudiantes de quinto grado, quienes tenían un muy buen manejo del español, por lo que su tarea se hizo mucho más fluida y sencilla, a diferencia de sus compañeras de carrera, “para mis colegas fue más difícil pues trabajaron con niños de Kinder, quienes estaban recién aprendiendo una segunda lengua, por lo que tuvieron que emplear sus herramientas de mejor manera que yo”, dijo.

El joven tuvo que aprender a adaptarse aprovechando cada oportunidad, poco a poco, fue adquiriendo nuevas competencias en el idioma inglés y metodologías de enseñanza para aplicar en sus labores, “poder trabajar con profesores de excelencia es algo que no tiene precio. Es una vivencia que va a ampliar tu zona de confort y te va abrir la mente”, enfatizó.

En medio de la crisis de la pandemia mundial C-19, tuvo que aprender a utilizar las herramientas online para poder seguir con su pasantía, “tuvimos la ventaja de que nos otorgaron un par de semanas para familiarizarnos con las plataformas y para poder diseñar actividades que nos permitieran tener un margen de tiempo”, expresó.

“Dejar de ir a la escuela fue algo muy complejo en un principio, como profesor es tu ambiente natural y en el que te sientes en confianza para llevar a cabo tus actividades. Creo que el aprendizaje en línea puede ser una muy buena opción si es que se pule de manera tal que sea beneficioso para los profesores y para los alumnos”, agregó.

Además reconoció que su experiencia trabajando como profesor online fue muy extenuante, ya que es una labor que demanda mucho tiempo porque no todos los estudiantes manejan las plataformas digitales de manera óptima.

A pesar de lo complejo de la situación, Juan reconoció que la institución realizó una buena gestión para afrontar la crisis mundial, lo que le generó confianza y seguridad, “antes de que el covid-19 llegara a Minnetonka, la universidad de Saint Thomas hizo un seguimiento bastante intensivo a nuestras prácticas profesionales. Una vez al mes recibíamos la visita de nuestro supervisor, el cual observaba nuestras clases y nos escribía una retroalimentación”, contó.

Sin duda, una experiencia única que solo le entregó satisfacciones y ganas de implementar nuevas técnicas y para que los estudiantes se comprometen mucho más con el aprendizaje.

“La creatividad de los docentes es un factor sumamente importante en las escuelas de Minnetonka, factor que se ha ido dejando de lado en Chile con el surgimiento de plataformas que venden material didáctico listo para ser implementado”, dijo.

Es por esto que, el crear conocimiento, examinar y cuestionar la calidad de los instrumentos que se utilizan en nuestro país en temas de educación, es una tarea que, ahora más que nunca, Juan considera imprescindible.

A continuación se muestran los seis alumnos UdeC que fueron seleccionados para irse de intercambio a EEUU: